Si su compresor de aire se comporta de forma anormal, no hay duda de que se trata de un problema que, con toda probabilidad, se deriva de problemas de calentamiento.
A continuación presentamos los signos más comúnes del sobrecalentamiento de un compresor de aire.
El compresor no enciende
Si el compresor no arranca normalmente, definitivamente hay algún problema con la máquina que podría provenir de un problema de temperatura. Si el compresor requiere duraciones más largas entre los ciclos de uso, los componentes internos probablemente tarden más en enfriarse entre cada ciclo. Del mismo modo, si la máquina se para durante el arranque y finalmente tarda más en entrar en el modo operativo completo, esto probablemente se deba a mecanismos internos degradados por el calor.
Los interruptores se disparan
En un compresor de aire, el flujo de corriente está regulado por el interruptor, que detiene el flujo cuando sea necesario como una medida de protección para el rendimiento y la calidad de la máquina. Si los interruptores actúan de forma irregular y se disparan en momentos aparentemente aleatorios, esto es una señal de que problemas más grandes acechan dentro del compresor de aire.
Problemas relacionados con el lubricante
Un compresor de aire podría emitir ruidos u olores que indiquen degradación del aceite. Si puede escuchar ruidos débiles de la máquina que parecen fuera de lo común, podría ser una cuestión de partes internas insuficientemente lubricadas. Una señal más clara de problemas con el aceite es cuando un compresor de aire huele a aceite quemado. De cualquier manera, el problema debe ser inspeccionado de inmediato, ya que la lubricación insuficiente y la mala calidad del aceite pueden tener un efecto dominó en los mecanismos internos de un compresor de aire.
Desgaste acelerado
Cuando un compresor de aire comienza a desgastarse a un ritmo acelerado, es probable que haya un asunto más serio. Por ejemplo, si la máquina presenta problemas de rendimiento tan solo a semanas después de la última revisión, es probable que algo no se haya evaluado correctamente, ya sea un problema con el aceite, las rejillas de ventilación, el refrigerante o las piezas del condensador. Si el compresor de aire es mucho antes de su hora y aún no puede manejar las demandas básicas, fácilmente podría haber un problema relacionado con el sobrecalentamiento.