En el artículo anterior revisamos 2 recomendaciones para mejorar la eficiencia de los equipos de aire comprimido; una de estas recomendaciones es incluir un tanque de almacenamiento, en este artículo vamos a revisar más detalles de por qué es altamente recomendado los tanques de almacenamiento para mejorar la eficiencia de un sistema de aire comprimido.
En muchas ocasiones el almacenamiento del aire no es considerado necesario en un sistema de aire comprimido. Hemos encontrado proyectos en donde se desecha el uso de tanques de almacenamiento, o en el peor de los casos no existe un dimensionamiento adecuado.
Los tanques tienen como principal objetivo el almacenamiento de un volumen específico de aire. Añadir un volumen de almacenamiento sin un propósito claro tiene un impacto mínimo para lograr un sistema con eficiencia.
Un sistema de aire comprimido eventualmente necesitará operar a altas presiones y aumentar el consumo de energía para mantener un alto rendimiento.
Mantener un alto rendimiento sin el almacenamiento de aire comprimido puede tener como consecuencia las famosas caídas de presión y consumir mucha mayor energía.
Por lo tanto, el almacenamiento de aire comprimido en primera instancia nos puede ayudar a controlar las caídas de presión.
¿Cómo nos puede ayudar?
Hay muchas aplicaciones que operan mucho más rápido que el tiempo de reacción de un regulador. El incremento en la demanda causa caídas de presión y reduce la velocidad del caudal. El almacenamiento de aire comprimido nos puede ayudar a mejorar la velocidad del caudal y proporcionar un volumen adicional de aire en este tipo de aplicaciones. El almacenamiento de aire le puede dar tiempo a un regulador para suministrar el caudal necesario y reducir las caídas de presión.
Sin almacenamiento, será necesario un incremento en la presión inicial, lo que puede ocasionar fluctuaciones y un mayor consumo energético.
El almacenamiento de aire comprimido protege al sistema de fluctuaciones.
Proteger al sistema de fluctuaciones es uno de los beneficios de incrementar el volumen de aire comprimido.
Al incluir el almacenamiento de aire comprimido, volumen de aire adicional puede ser suministrado en ciertas aplicaciones, reduciendo la demanda del sistema y manteniendo una presión fija por medio de una válvula check.
Otra cosa que hay que mencionar es que un tanque de almacenamiento ayuda a mitigar estos lapsos en que el sistema cambia de presión, sin embargo esto no quiere decir que va a eliminar las fluctuaciones. El enfoque del almacenamiento es estabilizar y controlar la presión por medio de un desfogue de aire. Un controlador de flujo en combinación con un tanque de almacenamiento nos puede ayudar para esta tarea.
Básicamente un controlador de flujo se encarga de detectar la presión en el punto de salida y modular el caudal de aire desde el tanque para mantener una presión constante.
En resumen, el almacenamiento de aire comprimido (propiamente aplicado y dimensionado) ayuda a reducir la demanda energética para mantener un sistema con un alta rendimiento, incrementa la productividad y reduce costos de operación. Cuando no tenemos almacenamiento de aire el sistema tendrá que trabajar a presiones más altas, requerirá más gasto de energía para compensar la falta de caudal de aire durante aplicaciones especiales o fallas del sistema. Antes de adquirir un equipo adicional, el almacenamiento de aire comprimido es una opción a considerar.